Uno de los aspectos más importantes antes de comprar un terreno es conocer su calificación, ya de ello depende la posibilidad o no de construir una nueva casa prefabricada o cualquier otro tipo de edificación, en qué condiciones y si existe alguna limitación.
En este artículo nos enfocaremos en los diferentes tipos de suelo urbano o suelo en ciudad. Este tipo de suelo se clasifica en dos tipos suelo urbano consolidado y el suelo urbano no consolidado.
¿Qué es el suelo urbano?
El suelo urbano es aquel que ha sido incluído en el planeamiento urbanístico de cada municipio, y que además dispone de los servicios urbanísticos básicos:
- Alcantarillado o evacuación de aguas.
- Suministro de electricidad.
- Abastecimiento de agua.
- Acceso rodado.
También se consideran parcelas urbanas aquellas que estén ubicadas dentro de un área metropolitana, en la ciudad, en una zona edificada y consolidada.
Para asegurarte de que una parcela suelo urbano, puedes buscar a través de la sede electrónica del catastro o en el ayuntamiento del municipio, donde podrás conseguir el planeamiento urbanístico que regula el suelo.
Ahora que sabes cómo buscar y verificar el suelo urbano, es momento de que sepas cuáles son los principales tipos. El suelo urbano tiene dos clasificaciones, consolidado o no consolidado.
¿Qué es suelo urbano consolidado?
En pocas palabras, el suelo urbano consolidado es el espacio correspondiente a la ciudad en sí, es decir, las parcelas edificadas y solares que requieran pequeñas obras de urbanización como reponer algún servicio urbanístico.
Además, el suelo urbano consolidado cuenta con los permisos para poder realizar construcciones (siempre con licencia de obra).
Pero ojo, porque un suelo urbano consolidado podría dejar de serlo en caso de que el planeamiento urbanístico general lo someta a ciertas actuaciones de transformación urbanística.
¿Qué es suelo urbano no consolidado?
Por otro lado, el suelo urbano no consolidado viene formado por aquellas partes de la ciudad en las que es necesario realizar obras para completar la urbanización o se prevén actuaciones de renovación urbana.
Es decir, son las partes de la ciudad que quedan sin edificar y las zonas en las que el planeamiento prevea la creación de nuevos edificios, apertura de nuevos viales, zonas verdes, plazas, etc.
En este sentido, si estabas pensando en construir en suelo urbano no consolidado, tu proyecto podría quedarse parado varios años a la espera de la resolución urbanística positiva. Todo dependerá de la aprobación de un Plan para que se pueda considerar como competente para la construcción y lograr un permiso de obras.