El mundo se niega a abordar la actual crisis del plástico. Estamos acostumbrados a su uso y dependemos de él para todo: lo utilizamos en nuestros envases, en la ropa, en todo tipo de productos. Literalmente, lo respiramos y lo comemos, y también nos bañamos en él.
Para ponernos en situación, desde los años 1950 se estima que se han fabricado 9.000 millones de toneladas de plástico. Pero el dato importante es que sólo se recicla el 9%, el resto se acumula en los vertederos, contamina los océanos y ensucia los entornos naturales.
- El plástico como material de construcción
- Conoce las casas de plástico de Conceptos plásticos
- Urbanizaciones hechas de plástico en países del África Subsahariana
Aunque se han realizado avances significativos hacia formas más sostenibles y alternativas al plástico, los expertos sostienen que la solución más eficaz a este problema sigue siendo la reducción general del consumo de plástico y el aumento de las tasas de reciclaje.
Sin embargo, a medida que la creciente preocupación por la contaminación y el calentamiento global se apodera del mundo, otros problemas humanitarios se encuentran hoy en día en auge. En particular, la falta de hogar y de vivienda adecuada.
Por qué el plástico es un buen material para la construcción de viviendas
Los plásticos son fuertes, duraderos, impermeables, ligeros, fáciles de moldear y reciclables, todas ellas propiedades clave para los materiales de construcción.
Pero todos los polímeros son, tecnológicamente, 100% reciclables. Algunos de ellos tienen el ciclo de vida perfecto: pueden utilizarse una y otra vez para producir los mismos productos.
Es más, algunos plásticos pueden reutilizarse tal cual, desmenuzando un objeto en escamas, fundiéndolo y reutilizándolo.
Estos plásticos reciclados pueden tener propiedades mecánicas inferiores a las de los plásticos originales, porque cada vez que se funde y procesa un plástico, las cadenas poliméricas se degradan. Sin emargo, estas propiedades pueden recuperarse al mezclar los plásticos reuitilizados con con aditivos o nuevos plásticos originales.
Algunos ejemplos de éxito en el reciclaje industrial son el PET o polietileno, que se utiliza para fabricar botellas de refrescos, y el poliestireno.
Todo el resto puede ser reprocesado técnicamente en nuevos materiales para diferentes aplicaciones, entre las que destacamos la capacidad de crear ladrillos de plástico para construir casas.
El problema es que el reciclaje de gran parte de estos residuos de plástico es actualmente inviable y poco rentable. Polímeros como los cauchos, los elastómeros, los termoestables y los residuos plásticos mixtos son etiquetados cómodamente como «no reciclables» por el sector del reciclaje.
Sin embargo, la cantidad de estos materiales en todo el mundo es aterradoramente grande y sigue creciendo. ¿Y si estos residuos de plástico pudieran utilizarse para producir algo útil para la sociedad?
Viviendas de plástico: de residuos a hogares
«La basura de una persona es el tesoro de otra».
En los últimos años, empresas de todo el mundo han llevado este dicho a otro nivel, trayéndonos casas de plástico reciclado.
El concepto de construir casas hechas de plástico reciclado nace como una solución directa a la crisis del plástico y la vivienda, ofreciendo una solución de casas asequibles y medioambiental para todos.
Por ejemplo, la empresa colombiana Conceptos Plásticos ha sido quien de reutilizar residuos plásticos para fabricar casas con ladrillos de plastico:
Cómo es la construcción de casas de plástico
El proceso que se sigue Conceptos Plásticos es el siguiente: la empresa recoge el plástico en las asociaciones de reciclaje o en las escuelas y grupos comunitarios con los que trabajan estrechamente para animarles a recoger diversos residuos de plástico y neumáticos viejos.
A continuación, los residuos de plástico se envían a su fábrica, donde el material se procesa, se pulveriza, se mezcla con aditivos, se funde y, finalmente, se convierte en vigas, pilares y bloques.
Como vemos, el resultado es un elaborado sistema de construcción que se ensambla como si se tratase de un juego de LEGO. Las casas de plástico pueden tener hasta dos pisos de altura y se montan en cinco días con sólo cuatro personas. Además, son ignífugas, resistentes a los terremotos, fáciles de mantener y rentables: una casa estándar cuesta unos 4.600€.
Urbanizaciones con viviendas de plástico
Más recientemente, otra empresa noruega fue noticia al asociarse con ONU-Hábitat para construir viviendas sostenibles en África subsahariana para personas que viven en asentamientos precarios.
La empresa noruega Othalo es conocida por su tecnología patentada que produce sistemas de construcción a partir de residuos de plástico reciclado.
Al igual que su homóloga colombiana, Othalo construye casas ecológicas, asequibles y resistentes al fuego, siempre fabricadas íntegramente con plástico reciclado.
La empresa noruega puede construir estructuras de hasta cuatro pisos y reciclar ocho toneladas de plástico para montar una casa de 60 metros cuadrados que parecen hogares de una película de Wes Anderson:
El proyecto pondrá en marcha un piloto inicial en algunas de las ciudades de mayor crecimiento del continente: Nairobi (Kenia), Dakar (Senegal) y Yaundé.
En cierto modo, esta alternativa de vivienda sostenible convierte el problema del plástico en una solución a otro problema. La durabilidad y larga vida de los residuos plásticos ofrece ahora un techo muy necesario para miles de ciudadanos.
Afortunadamente, la idea de combinar el reciclaje y la vivienda sostenible no se detiene en los residuos de plástico. Dado el continuo crecimiento de tendencias como el ahorro energético en los últimos años, podemos esperar ver cada vez más materiales reciclados y convertidos en soluciones de vivienda similares en el futuro.